La propuesta de ASEP para cambiar el esquema de medición neta en Panamá, conocido como “Impuesto al Sol,” desincentiva la energía solar, aumenta costos para todos y frena el desarrollo de energías limpias. Un retroceso económico, social y ambiental que afecta a toda la población.
El Impuesto al Sol en Panamá: Un Retroceso para la Energía Renovable
La reciente propuesta de cambios regulatorios presentada por la Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (ASEP) ha generado gran preocupación en la industria de energía solar en Panamá. Esta medida, conocida popularmente como “Impuesto al Sol”, afectaría directamente a los usuarios de paneles solares y tendría repercusiones económicas y ambientales para toda la población, incluso para quienes no cuentan con sistemas solares.
¿Qué es el “Impuesto al Sol” y por qué es problemático?
El “Impuesto al Sol” no es un término oficial, pero se refiere a las regulaciones que buscan imponer tarifas y costos adicionales a los usuarios que generan su propia electricidad a través de paneles solares. En lugar de incentivar la adopción de energías limpias, estas políticas desalientan la inversión en sistemas solares, afectando tanto a usuarios actuales como futuros.
Actualmente, en Panamá, los clientes que instalan paneles solares reciben créditos por la energía que generan y que no utilizan, reduciendo sus facturas eléctricas. Sin embargo, la propuesta de ASEP busca implementar:
- Un nuevo esquema de facturación neta (net billing) que reduce los beneficios económicos de los paneles solares.
- Una tarifa dual, que incrementaría los costos fijos para los usuarios de generación distribuida.
Este cambio prolongaría los periodos de recuperación de la inversión, haciendo que la adopción de energía solar sea menos atractiva.
Impacto Económico y Social: No Solo para Quienes Tienen Paneles
1. Desincentiva la Inversión en Energía Solar
La nueva regulación reduce el incentivo económico para instalar paneles solares. Al hacer menos rentable la generación propia, las familias y comercios optarían por seguir dependiendo de las redes tradicionales.
2. Aumenta Costos Generales para Todos
- Menos usuarios generando su propia energía implica mayor dependencia de fuentes de generación tradicionales (térmica o hidroeléctrica), lo que podría traducirse en mayores costos de generación y transmisión.
- Estos costos adicionales terminarían reflejándose en las tarifas de electricidad para todos los usuarios del sistema, incluso aquellos que no tienen paneles solares.
3. Impacto en Zonas Rurales y de Bajos Recursos
Las comunidades rurales y de bajos ingresos, que podrían beneficiarse enormemente de la energía solar como fuente limpia y accesible, verían limitada su oportunidad de acceder a tecnologías solares debido a mayores costos y regulaciones menos favorables.
Un Retroceso para los Compromisos Climáticos de Panamá
Panamá ha mostrado avances significativos en energía renovable durante la última década. El número de clientes con sistemas solares pasó de 13 en 2014 a más de 3,300 en 2023, con una capacidad instalada de 102,268 KW.
Aplicar un “Impuesto al Sol” afectaría directamente las metas climáticas del país, que dependen de la adopción de tecnologías limpias para reducir emisiones y cumplir con acuerdos internacionales. Además, generaría:
- Desconfianza en el sector energético, alejando inversiones.
- Retrocesos en innovación tecnológica, al frenar el desarrollo de generación distribuida.
Lecciones de España: El Fracaso del “Impuesto al Sol”
España implementó un esquema similar conocido como “impuesto al sol”, que rápidamente generó rechazo masivo. Esta política no solo provocó protestas sociales, sino que también:
- Desalentó la adopción de energía solar.
- Aumentó los costos energéticos para todos los consumidores.
- Retrasó el desarrollo de infraestructura renovable, lo que obligó al gobierno a eliminar la medida.
Panamá podría enfrentar un destino similar si ASEP avanza con estas regulaciones sin un proceso de diálogo inclusivo y con participación de todos los actores del sector.
Conclusión: El Camino a Seguir
El actual esquema de medición neta ha demostrado ser un instrumento eficiente para fomentar la generación distribuida en Panamá. Proponer cambios sin una adecuada transición y sin considerar a los usuarios e instaladores:
- Desincentiva la adopción de paneles solares.
- Incrementa los costos del sistema eléctrico para toda la población.
- Compromete los compromisos climáticos y energéticos del país.
La Cámara de Energía Solar de Panamá ha solicitado a ASEP reconsiderar estas medidas, mantener el esquema de medición neta y establecer un proceso de consulta pública más inclusivo. El desarrollo sostenible y el acceso equitativo a la energía limpia deben ser prioridades nacionales.
Un “Impuesto al Sol” no solo afecta a quienes tienen paneles solares, afecta el futuro energético y económico de todo el país.